El sexo anal está cada vez más normalizado y se practica con intención y deseo. Sin embargo, ante la falta de preparación puedes encontrarte con una gran decepción o, peor, un gran dolor. Evita traumas propios o ajenos y disfruta del sexo anal fácil con los siguientes consejos. Un pequeño spoiler: la paciencia es la clave.

El funcionamiento del ano
Al contrario que la vagina, que está preparada para dilatar y lubrica por su cuenta, el ano no dilata con tanta facilidad ni lubrica. Sin embargo, esto no significa que tu cuerpo te esté diciendo que tu ano no sirva como vía de entrada. Al fin y al cabo, si algo puede salir, también puede ser una entrada.

Antes de entrar en materia, me gustaría hablarte de cómo es el ano por dentro junto con una imagen. Lo que llamamos comúnmente esfínter, en la imagen se marca como «plexo venoso rectal interno». Como puedes ver, dentro del ano y separándolo del recto, tenemos un segundo esfínter interno.
Entonces, con una idea un poco más clara, deja que te diga que sí, que en el ano, tengas los genitales que tengas, tienes dos esfínteres. El de fuera, que puedes abrir y cerrar a voluntad, y el interno, el que controla tu cerebro y se abre cuando las heces pasan del recto al ano. Así cuando sientes ganas de defecar lo que sientes son las heces en esta «recámara».
Por supuesto, si tienes pene, desde el ano puedes palpar la próstata. Por lo que de forma objetiva se considera que el placer anal es más placentero para personas con pene, aunque como siempre cada persona es un mundo y cada cual siente diferente tanto física como emocionalmente.

Dilatación, lubricación y paciencia
Ahora que ya tienes la base de anatomía que considero necesarias para practicar sexo anal sin incidentes, el paso a paso es muy sencillo. Tu intención es que el ano dilate para que pueda «aceptar» un pene, plug, dildo, estimulador prostático… sin dolor y sin problemas. Sigue este paso a paso:
- Estimula la entrada del ano con lubricante hasta que puedas insertar un dedo.
- Estimula con el dedo el ano por dentro, rodea las paredes e intenta ir todo lo profundo que te permita tu dedo.
- Cuando sientas el ano más flojo, inserta otro dedo.
- Añade más dedos cuando puedas separar los dos que hay dentro sin sentir tensión.
- Mete tantos dedos como el equivalente al grosor del dildo, plug, pene o similar que vayas a insertar.
- Es importante respirar.
- Comunicación constante.
- Si lo que va a ir dentro del ano es más largo que tus dedos, es probable que haya resistencia del esfínter interno, así que es importante meter poco a poco, por ejemplo, el dildo desde la punta hasta la base.
- Quédate ahí y muévete al ritmo que la otra persona sienta cómodo.
Consejos extra
- Ten a mano lubricante y paños húmedos.
- Manos limpias.
- Uñas cortas.
- Utiliza guantes o preservativos de dedos.
- Utiliza una postura donde el ano quede más abierto por naturaleza (cuclillas).
- No centres la atención únicamente en el ano, estimula otras zonas erógenas para «despistar» y relajar.
- Utiliza preservativo (crea una superficie más lisa y lubricada además de proteger).
Te dejo también un video en el que hablo sobre este mismo tema:
Anticipación y deseo
Ahora, ¿vas a tener que repetir este proceso largo cada vez? Sí y no. Porque el cerebro humano funciona por anticipación y, si sabe lo que va a pasar y que es placentero, mandará las señales que necesite tu cuerpo para dilatar el ano con más facilidad.
Esto no significa que si practicas sexo anal el ano se te queda flojo, solo que tu cuerpo ya sabe lo que se viene y te lo pone más fácil. Así, el tiempo de dilatación será más corto y antes podrás pasar a la acción.
A su vez, practicar con éxito sexo anal aumenta el deseo hacia está práctica. Así, a menos miedo y menos tensión de la persona que va a ser penetrada, dilatación más rápida y menos entumecimiento posterior. ¡Todo son ganancias!
Preguntas frecuentes
¿Lubricante anestésico sí o no? No. Nunca. Existen lubricantes para el sexo anal que son relajantes y más recomendables. Los anestésicos hacen que no se sienta el dolor, pero tampoco el placer. Además, si hay desgarros no se notará hasta que sea demasiado tarde.
¿Debo invertir en un plug? Los plugs relajan la zona y aportan placer por igual. ¡Es elección tuya!
¿Debo invertir en dilatadores? Si no quieres usar los dedos, sí.
Si tengo miedo del sexo anal… Depende únicamente de ti si lo practicas o no. Nadie te puede obligar. Sin aun así quieres intentarlo, comunícate con tu pareja o domina la situación dilatándote o sentándote sobre el dildo o pene.
Lavativas y enemas, ¿sí o no? Si quieres que todo esté «limpio», puedes emplear un enema de agua templada pero nunca utilices jabón u otros cosméticos en el interior de tu ano. Tampoco es recomendable emplear lavativas a menudo para no alterar la flora intestinal ni el PH de tu ano. Si sale «caca», siempre se puede limpiar y, además, que no sea visible no significa que no haya bacterias. Así que utiliza siempre preservativo.
Claves para un sexo anal fácil
Al final, la clave del éxito está en la paciencia y en la repetición. Comunícate con tu pareja, disfruta y sigue mis consejos que están muy bien contrastados y funcionan con todo tipo de cuerpos. Aun así, ten el cuenta que cada persona es sensible a su manera y cada cuerpo necesitará un tiempo diferente de dilatación. Quizá una persona dilata rápidamente con pocas sesiones y otra necesita meses.
Si tienes más dudas, déjalas en los comentarios o contáctanos.